Para estar
bien informado
Encuesta en
establecimientos de la Cuenca del Salado.
La
producción ovina en la Pradera Pampeana representa en la actualidad aproximadamente
el 10 % de población ovina del país. Esta actividad se integra con otras
producciones ganaderas y agrícolas siendo muy pocos establecimientos los que la
impulsan como recurso único. El rol que ocupa en los establecimientos es
secundario siendo la producción bovina y la agricultura las principales
actividades. Se realiza esencialmente para el consumo de carne en los propios
establecimientos o para la venta de corderos en la época primaveral.
Frente a este contexto productivo resulta
escasa la información de datos básicos de producción disponible, hecho que ha
impulsado a referentes técnicos de la Estación
Experimental del INTA Cuenca del Salado a trabajar sobre la caracterización de los
sistemas ovinos de la región, para
obtener información de los sistemas reales de producción, como acción
de apoyo de tareas de extensión e investigación y con el fin de aportar herramientas de eficiencia y desarrollo al sector.
El
trabajo para la obtención de la información se inició con la visita a 22
establecimientos ganaderos ubicados en los paridos de Azul, Rauch, Alvear,
Tapalqué y Ayacucho, campos que en
conjunto comprenden una superficie territorial de más de 8 mil hectáreas. En
cada uno de ellos se realizó una encuesta a los propietarios, que relevaba
diferentes datos productivos siguiendo un protocolo previamente definido.
El
relevamiento del INTA permitió observar que “en todos los establecimientos
encuestados se desarrolla la actividad ovina con diferente grado de
intensificación, pero es la producción
bovina la actividad principal en cada uno de ellos”. Del total de campo
evaluados “el 73 % realiza solamente la cría de terneros y en el 27 % de ellos, además, se llevan a cabo otras
actividades como la recría, engorde-terminación y cabaña”. De la totalidad de
hectáreas en estudio “a esta actividad se destinan 924 representando un 11 %
del total de hectáreas”. En esta superficie se relevaron 2243 ovejas, 117
carneros, 1272 corderos/as y 636 borregos/as. El 68 % de “los productores utilizan
razas únicas y el 32 % tiene más de una raza”. De los que presentan razas
únicas, las dos más utilizadas son la Corriedale y la Romney (grafico 1).
De
los que utilizan más de una raza, “el 25.55 % utiliza Corriedale y Romney y
Corriedale y Hampshire, seguido por el 14.3 % que utiliza Corriedale y
Pampinta” (gráfico
2).
Con
la encuesta se determinó que “en todos los casos, el cordero que es el producto
principal, está destinado a la venta en época primaveral y al consumo propio”.
La lana se comercializa en época de esquila pero es considerada como producto
secundario sobre todo porque en los últimos años no se vieron favorecidos por
los precios.
En
cuanto a las características particulares de producción los técnicos del INTA
observaron “una gran diversidad en la alimentación de las majadas, dado que
“son manejadas con diferentes recursos forrajeros”. El 78 % de los productores
maneja su majada sobre campo natural solo o con alguna alternativa extra de
alimentación, el 18 % utiliza exclusivamente pasturas ya sea nuevas o
degradadas y el 4 % las maneja solamente con rastrojo, rollo y suplementación.
Es así que, según indican los profesionales “si bien se puede observar una gran
diversidad en el manejo alimenticio, es el campo natural la base de la
alimentación en la mayoría de los establecimientos en estudio”.
Para
el manejo reproductivo, según las encuestas, “el 63,7 % de los productores
estacionan el servicio y el resto (36.3
%) mantiene los carneros todo el año con las hembras”. De los que estacionan
servicio, “el 35.7% realiza el servicio entre los meses de marzo y abril y el
64.3 % lo hace entre los meses de diciembre y febrero. Los productores que
realizan el servicio adelantado lo hacen para anticipar las pariciones y evitar
así la época de mayores riesgos climáticos y reducir de esta manera la pérdida
de corderos”. Solamente “el 22.7 % de los productores hacen ecografías post
servicio para hacer repaso de las hembras vacías y también para detectar
preñeces múltiples y suministrar así alimentación diferencia”. Esta es una
herramienta de manejo importante que los diferencia del resto de los
productores y que les permite obtener resultados importantes.
Con
el relevamiento se determinó que de la totalidad de establecimientos, “el 41 %
presentó problemas al parto principalmente en ovejas melliceras y borregas”. El
81 % de los establecimientos reportaron pérdida de corderos de los cuales el
33.3 % fueron por causas climáticas (frio y lluvias) y el 27.8 % por zorros,
caranchos y perros. En todos los casos, “las muertes se dieron dentro de la
primera semana de vida. El porcentaje restante se corresponde con otras causas
como asfixias, muerte de la madre y pérdida de corderos melliceros”. Sin
embargo “no se puede precisar el número exacto de corderos muertos porque no
todos los productores registraron dicha cantidad”.
Para
la cría solamente “el 27.3 % de los productores desteta a fecha fija, el resto
va realizando el destete a medida que se realiza la venta de corderos”. En
materia de manejo sanitario de los 22 campos evaluados, “el 54.5 % cumple con
el plan básico de desparasitación y vacunación contra mancha, gangrena y
enterotoxemia”. En algunos casos que se consideró necesario, realizaron el
control eventual de alguna enfermedad, como por ejemplo, pietín.
Con
la sistematización de la información los técnicos de la Estación Experimental
del INTA Cuenca del Salado pudieron determinar que “existe una gran diversidad
en la producción ovina en los partidos evaluados. Esto implica diferente nivel
de intensificación entre productores con resultados productivos completamente
diversos”.
En
líneas generales se observó que “la raza más utilizada es la Corriedale, el
manejo alimenticio básico se realiza sobre campo natural y más de la mitad de
los productores realizan servicio estacionado”. Si bien en ninguno de los casos
es considerada la actividad principal del establecimiento, “hay sistemas bien
estructurados, con un buen manejo y otros que necesitan reorganizar su sistema
productivo y aplicar pautas de manejo básicas”.
Para
mayor información:
EEA Cuenca del Salado. AER Azul.
Av. Perón 1015 (7300), Azul Tel/Fax. (2281)
424760
E-mail:
mvdonzelli@inta.gob.ar
Referente: Ing. Zoot. M. Sc.